martes, 27 de julio de 2010 0 comentarios

SUEÑO CON MI QUERIDO PROFESOR

Me llamo Lucia y cuando esto ocurrió tenía 22 años y hacía poco que había comenzado una relación con Sergio, uno de mis profesores de facultad, casado y que entonces tenía 42 años.
Habíamos tenido varios escarceos en los que nos habíamos besado, acariciado y demás pero no habíamos llegado a más, no habíamos tenido sexo puro y duro porque en el momento de la penetración se le había bajado la erección y quería que eso cambiara. 
Era un viernes después de comer y esa semana solo le había visto en clase, no había podido hablar con él fuera de clase porque había tenido que hacer algunos trabajos y estudiar para los exámenes y tenía tantas ganas de estar con él que decidí llamarle por teléfono pero cada vez que le llamaba me saltaba el buzón de voz y no hubo manera de hablar con él. 
Como he dicho, esa semana había sido larga y agotadora y estaba cansada y me quedé dormida y tuve un estupendo sueño con Sergio. 
viernes, 23 de julio de 2010 0 comentarios

EL PADRE DE MI NOVIA (I)

Son las 7 de la mañana y como cada mañana suena el despertador, lo apago y me desperezo. Hoy es viernes, bendito viernes, por fin acaba la semana, menuda semana sin parar en el trabajo, estoy agotada, necesito descansar bien el fin de semana, no he planeado nada porque Nuria se va de viaje el fin de semana y tengo toda la casa para mi sola.
Me meto en la ducha y es cuando empieza a torcerse el día, no hay agua. Salgo de la ducha, me pongo lo primero que encuentro, meto ropa limpia y demás en una bolsa, me voy echando leches para el trabajo y allí me ducharé y asearé antes de entrar.
Me subo al coche y me encamino hacia el trabajo con tan mala suerte que la carretera está cortada por un accidente y cuando me doy cuenta ya no puedo coger una alternativa y me chupo el atasco.
Llego al trabajo con solo 30 minutos de antelación, solo 10 minutos antes que de costumbre, pero aún sigue mi mala suerte, me encuentro con uno de los jefes y me llama la atención por mi indumentaria pero no me quedo a escucharle y salgo corriendo para los vestuarios. 20 minutos después entro por la puerta del despacho totalmente cambiada y me vuelvo a encontrar al mismo jefe; ahora no tiene por más que sonreír y darme su visto bueno.

jueves, 22 de julio de 2010 0 comentarios

CIBERSEXO

Javier se encontraba en su cama frente al portátil cuando le salió una notificación de su Messenger como que “brujita” había iniciado sesión, pero como estaba contestando correos importantes del trabajo hizo caso omiso, pero unos minutos después “brujita” inició una conversación con él y…


0 comentarios

LA DESPEDIDA

Era viernes y había quedado con Juan pero no le había dicho lo que quería, le tenía reservada una sorpresa.
Hacía poco tiempo que nos habíamos conocido, pero me había calado muy hondo, algo extraño en mí, más aún cuando Juan me sacaba 20 años.
Había conocido a Juan un mes atrás cuando había venido a hacer una suplencia, precisamente de un mes, al colegio donde trabajo. Ha sido solo un mes pero ha sido suficiente para hacernos ver que estábamos en la misma onda, el único problema es que está casado y por eso apenas nos hemos visto y al ser hoy su último día quería despedirme de una forma especial, para que no me olvidase en mucho tiempo.

0 comentarios

EN LA CUNETA

Era una calurosa mañana del mes de Agosto, el despertador sonó a su hora, a las 6 de la mañana. Me levanté de la cama completamente empapada en sudor y me metí directamente en la ducha para refrescarme y al mismo tiempo despertarme ya que tenía que coger el coche para llegar hasta mi lugar de trabajo. Me arreglé, cogí mi bolso, fui al garaje a por el coche y me puse en camino.
Para llegar a mi trabajo tenía que conducir unos 30 Km. de los cuales unos 10 Km. eran por una carretera comarcal de dos direcciones y sin iluminación. Salí de mi localidad y me incorporé a la carretera y nada más hacerlo el motor del coche empezó a hacer un ruido muy raro y unos kilómetros más adelante dejó de hacerlo pero inmediatamente después se paró, tuve el tiempo justo para salir de la carretera y meterme en la cuneta.
Aún no eran las 6 y media y allí estaba yo parada en medio de la nada. Salí del coche y abrí el capot para ver si veía algo raro. No vi nada raro, tampoco es que entienda demasiado de motores, pero me defiendo con ellos, así que lo primero que hice fue llamar a mi seguro para que me mandasen una grúa:
 
;